Las autoridades mantienen el cronograma del proceso. Pero postergaron la apertura de los sobres para ocho días antes del cambio de presidente.
Si bien desde el Gobierno aseguran que se mantendrá la licitación a pesar del clima político y de la crisis financiera que sufre el país, el traspaso del Puerto de Buenos Aires a un solo operador podría sufrir demoras y hasta una eventual cancelación de todo el proceso.
De hecho, desde varios sectores ligados con las actividades portuarias se asegura que la apertura de los sobres con las ofertas podría aplazarse para mayo del año próximo con el objetivo de que sea el nuevo gobierno que asuma a partir del 10 de diciembre el que tome la decisión de continuar con el plan o de darlo de baja y estudiar un nuevo proyecto.
Hasta algunos se animan a sostener que el Frente de Todos buscará modificar drásticamente el proyecto inicial que todavía defienden desde el gobierno de Mauricio Macri para entregar a un solo operador las cinco terminales en reemplazo de los cuatro grupos que actualmente se reparten las actividades del puerto porteño.
En la actualidad, las actividades portuarias se encuentran divididas entre cuatro terminales. Es decir, Terminales Río de la Plata (TRP), a cargo de las zonas 1,2 y 3 de Puerto Nuevo y que está formada por Dubai Ports Word, un holding estatal de Emiratos Árabes, y el grupo local propiedad de Alfredo Román. También Maersk, que está a cargo de la Terminal 4, y Hutchinson Ports, que controla la Terminal 5.
Como parte del proceso licitatorio, todas deben entregar sus concesiones en el 2020, según una Resolución del Ministerio de Transporte de la Nación publicada en el Boletín Oficial publicada en diciembre del año pasado.
Sin embargo, se habla de la posibilidad de ampliar ese período hasta mayo del 2021. Es decir, sumarle un año ante la eventual posibilidad de que todo el proceso licitatorio se atrase o se congele por el cambio de escenario político.
Lo concreto hasta el momento es que la Administración General de Puertos (AGP) que comanda Gonzalo Mórtola aplazó hasta el próximo 2 de diciembre la apertura de los sobres con las ofertas que en el cronograma inicial se iban a conocer el 2 de octubre. Una determinación con buen criterio y, aunque el funcionario no lo diga, vinculada a la coyuntura política y electoral actual.
Este cambio es el que más ruido ha generado en el mercado, en especial teniendo en cuenta que se conocerán los nombres de los grupos candidatos a quedarse con el negocio ocho días antes de que, si el proceso electoral se mantiene como los resultados de las PASO, Alberto Fernández se convierta en el nuevo presidente de los argentinos.
En diálogo con iProfesional, el propio Mórtola desestimó cualquier posibilidad de cancelar la licitación y sostuvo que la transformación de la actividad en el puerto porteño se trata de una política de Estado que debe trascender a los gobiernos de turno.
«La licitación marcha tal cual la hemos establecido y si corrimos la apertura de los sobres fue para hacer caso a un pedido de los candidatos que pidieron más tiempo para analizar los pliegos», agregó el titular de la AGP.
Sin embargo, fuentes del mercado y de algunos de los grupos que se anotaron para participar de la licitación estimaron que el próximo gobierno pondrá en revisión el proceso, en especial para estudiar los reclamos gremiales y de sectores peronistas que piden modificar las condiciones y hasta en algunos casos proponen dividir las actividades entre dos operadores.
También para escuchar la postura de las pymes, preocupadas por entender que la unificación de la operación provocaría una pérdida de al menos 500 puestos de trabajo. Como ejemplo, argumentan lo sucedido tras la presentación del procedimiento preventivo de crisis de TRP que en julio del año pasado provocó un centenar de despidos.
En cuanto a la licitación, hasta ahora serían cuatro las empresas que habrían presentado ante la AGP ofertas concretas para asumir las operaciones: TRP; APM Terminals; Hutchinson Ports y el grupo inversor filipino International Container Terminal Services (ICTS). Fuente: Iprofesional, Por Andrés Sanguinetti